Lena es una joven mayor con gran talento de la República de San Magnolia a la que asigan a un escuadrón de soldados famoso por hacer que todos sus Handlers acaben dejando el puesto. Lena no soporta que se mienta al público diciendo que las unidades del frente no están tripuladas, pero ¿podrá lidiar con aquel al que llaman "parca"?

Lena comienza a trabajar activamente con su escuadrón de Eighty-Six, quienes parecen aceptar que su nueva Handler no es la típica niña rica que los trataría con desdén. Pero lo que hace que comiencen a verla con buenos ojos no es solo actitud, sino también su buen ojo para la estrategia.

Lena comprende que pese a sus buenas intenciones, los prejuicios todavía predominan en su relación con los Eighty-Six, a quienes ni tan siquiera ha preguntado sus nombres. ¿Podrá la relación entre ella y el escuadrón de jóvenes guerreros salvarse de algún modo?

Lena sigue con su vida mientras los Eighty-Six combaten sin descanso, pero es entonces cuando Undertaker le explica unas cuantas cosas que desconocía y la horrorizan.

Lena intenta conseguir recursos para ayudar a Spearhead, pero una vez más, la reticencia del gobierno a considerar dignos de ayuda a los "cerdos" que usan como carne de cañón se interpone en sus objetivos. Mientras, también descubre que Shin carga con mucho más incluso de lo que ella pensaba.

Lena sigue mejorando su relación con los miembros de Spearhead, pero estos todavía le guardan un importante secreto, algo que saben y afecta directamente a su destino.

El escuadrón Spearhead recibe una misión suicida y Lena no puede sino intentar que sea anulada, pero lo cierto es que la República no tiene ningún interés que que sobreviva ninguno de esos a los que consideran sucios cerdos de color.

Shin se enfrenta a su hermano en el campo de batalla y el resto del escuadrón Spearhead espera poder seguir avanzando para salir a los límites de la República, pero aunque Lena debía desconectar, no está dispuesta a abanadonar a su equipo.

El escuadrón Spearhead sigue avanzando lejos de la República y adentrándose en el Imperio. No conocen su destino, no saben cuál es su futuro, pero viven cada día disfrutando de su renovada pero efímera libertad. ¿Qué les aguarda?

Los pocos supervivientes que quedan siguen avanzando, ¿hasta dónde llegarán?

Lena tiene a sus órdenes a un nuevo escuadrón y su costumbre de apoyar a los Eighty-Six le ha hecho ganarse una reputación peculiar. Mientras ella hace enojar a sus superiores con sus decisiones, Shin y el resto han sido rescatados por Guiade...

Nuestros protagonistas parecen haberse hecho a la vida en la República, pero poco a poco su deseo de volver al campo de batalla toma más y más fuerza.

Shinei y el resto completan su entrenamiento en la academia y se convierten en soldados de la República, pero sus nuevos compañeros los repudian.

La Federación se prepara para un posible ataque a gran escala de los Legion, pero nuestro protagonista sabe cuál es la situación real, aunque no puede decir nada sin tener que revelar su poder.

Los Legion lanzan un ataque a gran escala contra varios países y estos se defienden como pueden. Por suerte, Shin y sus compañeros ya previeron todo y pueden actuar cuanto antes, pero ¿qué sucederá con la República de San Magnolia?

Con los Legion atacando en masa y un nuevo tipo llamado Morpho amenazando a todos los países, se impone una misión coordinada en la que los Eighty-Six volverán a caminar hacia su muerte. ¿Es algo que aceptarán?

Se avecina el combate contra Morpho en el cual los 86 serán la fuerza clave, pero parece que mucha gente prefiere que no vayan al campo de batalla, o al menos, que regresen todos con vida.

El ataque contra Morpho se complica y las esperanzas de supervivencia caen drásticamente. ¿Cumplirán los 86 su misión?

Aún persiguiendo a Morpho, Shin comienza a dudar de sus propios motivos para seguir adelante y sus compañeros intentan hablar con él, pero parece que ha vuelto a ser tan retraído y solitario como lo era antaño. Poco a poco los vínculos forjados por los Eighty-Six gana importancia y todos parecen coincidir en algo: deben vivir.

Shin sigue avanzando sin descanso hacia Kiriya, pero sus compañeros van quedando atrás poco a poco.

El campo de batalla está en una calma temporal y Shin madlice su suerte, pero un encuentro va a darle un pequeño rayo de esperanza.

La operación para destruir el morfo fue un éxito, y Shin y su equipo cumplieron su promesa de regresar a la Federación con vida. Después de disfrutar de un breve respiro, una vez más desearon servir en las unidades de primera línea, pero recibieron un cierto aviso de Ernst. Después de cruzar los campos de batalla mortales de la República, llegaron a una nueva reunión en la Federación. Luchan, sufren y ven un rayo de esperanza. Esta es una historia de niños y niñas que han comenzado a moverse poco a poco. Al final de su viaje, ¿qué se refleja en sus ojos?