En Madrid, a finales de los 70, cuando oscuras tramas amenazaban desestabilizar la recién recuperada democracia, cinco militantes de un pequeño partido de extrema izquierda, muy diferentes entre sí, son seleccionados para formar un "Grupo Revolucionario Armado Proletario". Con escasos medios y tras un discutible entrenamiento, atracan un banco y asaltan una gran fábrica del sector del metal. Paralelamente, dos brigadas policiales, entre las que existe cierta rivalidad, son encargadas de su desarticulación. Los "graps" llevan a acabo una serie de atentados mortales que culminan en la colocación de una bomba en una céntrica y concurrida cafetería. El cerco policial se estrecha, uno de los detenidos muere en el interrogatorio y comienza a sospecharse que hay algo muy extraño detrás de todo el asunto.