Cheech y Chong debutan con esta disparatada comedia rokera, ofreciendo toda la locura, estilo de vida y números que les hicieron vender más de diez millones de discos a comienzos de los años 70. El peculiar humor repleto de marihuana de Cheech y Chong, hace que vuelen muy alto y que todo culmine en un final increíble en el Teatro Roxy de Los Ángeles, donde Cheech actúa con tutú rosa y Chong con una enorme túnica roja -información de la distribuidora-.

Cheech (Cheech Marin) y Chong (Tommy Chong) son dos jóvenes drogadictos que viven a la aventura, sin pensar en las consecuencias y codeándose de gente igual o más loca que ellos. Cheech pierde su trabajo, y tiene que aguantar a su vecino. Su único objetivo es la vida es conquistar el corazón de la atractiva Donna. Por su parte, Chong convence a su primo Cheech para irse juntos a Hollywood en un Ferrari. ¿En qué desencadenará esta locura? (SENSACINE)

Haciéndose pasar por vendedores de helados, Cheech y Chong ganan una fortuna de millones de dólares vendiendo un cargamento de marihuana que, por supuesto, acaban perdiendo.

Hoy en día, todo el mundo tiene problemas y Cheech y Chong no son una excepción. Slyman y Habib los contratan para conducir una limusina a Las Vegas con cinco millones de dólares escondidos en secreto en el asiento delantero. Para llegar allí, la pareja vende el coche pieza por pieza, incluido el asiento delantero, que vale siete cifras. Cheech y Chong tienen un problema mucho mayor: Slyman y Habib los persiguen y juran matarlos después de torturarlos.

Cheech y Chong continúan haciendo de las suyas: aquí ambos muestran su lado más salvaje, alocado, descontrolado, interpretando esos personajes descabellados y secuencias delirantes que los han convertido en unos de los actores más “estrellados” de la historia del cine. Estamos ante el "colocón" definitivo de Cheech y Chong.

Loosian y Louis son dos hermanos que nacieron caballeros pero que vivieron como campesinos. Tras más de 20 años separados se reúnen de nuevo y empiezan a surgir las aventuras.

Get Out of My Room, fue un falso documental al estilo de This Is Spinal Tap, escrito y dirigido por Cheech Marin. En la película, se muestra a él y a Tommy Chong intentando terminar un "álbum de vídeo" para su novedoso disco Get Out of My Room.