La cantante de un club de jazz aparece estrangulada en el callejón trasero del local. El gerente solo sabe que se hacía llamar Julie Garland y que tenía una estrecha relación con su pianista, un joven de carácter impetuoso que ha desaparecido después de que se cometiera el crimen.

Un francotirador aterroriza París tras matar indiscriminadamente a siete paseantes en un parque. La capital se declara en estado de alerta máxima. Cuando el tirador ataca a una nueva víctima y, después, a los cuerpos de apoyo que acuden, se empieza a trabajar con la hipótesis de un ataque de naturaleza política.

El cadáver ensangrentado del psiquiatra Antoine Garrencq aparece expuesto en escaparate de una tienda de barrio. El descubrimiento de dos crímenes anteriores llevados a cabo en Suiza con el mismo modus operandi lleva a pensar que se trata de la obra de un asesino en serie.

Chloé interviene en un programa de radio para aconsejar a los oyentes que llaman en directo. Mientras atiende a una mujer que sufre el maltrato de su marido, este aparece y la agrede mientras está en antena.

Dos niños desaparecen de la habitación de un hotel mientras sus padres aprovechaban el momento de su siesta para salir a comer juntos. Rápidamente la policía se moviliza para intentar encontrarlos después de descubrir la existencia de somníferos y sangre en la habitación.

Rocher y Chloé investigan la muerte de Pierre Vasseur, un pintor hallado muerto en su taller de trabajo. Una antigua amante le había avisado de que su muerte estaba próxima. Ella creía que los dos eran la reencarnación de dos amantes que vivieron en 1945.

Rocher y su equipo trabajan para hallar el culpable de la muerte de Baptiste Julian, un muchacho de 17 años, estudiante de un selecto colegio, cuyo cadáver fue encontrado con varias puñaladas en un bosque cercano al centro educativo.

Marie, una joven de 25 años, aparece apuñalada sobre el altar de una iglesia. Poco después, Gabriel Mangin, un delincuente reincidente, confiesa que ser el asesino. Durante su interrogatorio, Gabriel sufre extraños cambios en su comportamiento, lo que lleva a Chloé a pensar que sufre esquizofrenia.

Julie Lafayette, una brillante estudiante de química, aparece asesinada. Todos los indicios apuntan a que ha sido un ajuste de cuentas entre traficantes de droga. Pero la investigación va adquiriendo tintes cada vez más dramáticos para todo el equipo.

Al mismo tiempo que el prefecto de policía presenta a tres jóvenes estudiantes de criminología en prácticas a los miembros de la comisaría, se recibe un impactante DVD con las imágenes de una mujer que muere degollada ante la cámara que graba.

Chloé se desmaya cuando cree reconocer a su madre entre los invitados a una recepción en casa del prefecto. A pesar de que su madre murió apuñalada por su padre hace veinte años, Chloé se lanza a la busca desesperada de esa mujer que vio entre la multitud.